La protección laboral, en cualquier tipo de trabajo y en cualquier tipo de industria, es fundamental e intransferible. Y es que, no solo previene posibles daños o lesiones leves, sino que puede ser lo que separe al operario en cuestión de la muerte en caso de accidente.
En Suministros Fenollar ya hemos hablado sobre la importancia de esta protección, más aún en determinados sectores industriales, donde los daños causados de un incidente puede conllevar graves problemas para el bienestar de los trabajadores.
Sin embargo, en el artículo de hoy queremos centrarnos en las manos ya que las lesiones en esta parte del cuerpo son muy comunes.
Escoger los guantes de protección es clave para la protección de agentes químicos, el frío, el calor, cortes, etc.. Así que ¡toma nota!
El tamaño de los guantes
Una de las primeras cosas en las que uno se debe fijar a la hora de elegir unos guantes de protección, es el tamaño. Pues si se opta por una talla más pequeña de la necesaria se pueden romper e incomodar; y, si es demasiado grande, estos se pueden caer. De ahí la importancia de escoger unos guantes de tallaje adecuado para garantizar una protección total, además de comodidad y mayor destreza a la hora de trabajar.
Para saber el tamaño correcto solo es necesario una cinta de medir. En concreto, se debe girar la cinta alrededor de la mano en la zona de más anchura. Esa es la medida que se debe tener en cuenta a la hora de comprar los guantes de protección.
En el caso de hacerlo por longitud, se debe medir desde la punta del dedo corazón hasta la muñeca.
Generalmente, el tallaje suele ser:
- Talla S: 19 centímetros.
- Talla M: 20 cm.
- Tamaño L: 21,5 cm.
- Talla XL: 23 cm.
- Talla 2XL: 25 cm.
Una vez elegidos los guantes de protección, se debe decidir qué tipo de guantes son los más adecuados según el tipo de trabajo. Es muy importante que cuenten con la certificación CE.
¿Qué es la certificación CE?
Hace referencia a Conformidad Europea y se otorga a todos los productos que cumplen con la normativa europea.
Todas estas reglas se aplican a ciertos aparatos electrónicos, juguetes y equipos de protección personal. Todo lo que, al fin y al cabo, conlleve algún tipo de riesgo para las personas.
¿Qué función tienen los guantes de protección?
La principal función de los guantes es nada más y nada menos que protegerte en el lugar de trabajo.
Y, ¿cómo lo hacen? Otorgándote una segunda piel, que será la que proteja ante cortes, quemaduras o posibles infecciones. Para ello, es relevante elegir un guante que se adapte, tanto a la forma y tamaño de la mano, así como al tipo de trabajo a desarrollar.
No es igual una persona que trabaje con cuchillos o elementos cortantes que una persona que, por ejemplo, trabaje con materiales a altas temperaturas. De ahí la importancia de elegir el material adecuado según el peligro que tenga cada trabajo.
Tipos de guantes de protección
Aunque existe un extenso catálogo, en esta ocasión, queremos destacar estos tres modelos de guantes de protección:
#1. Guantes de nitrilo
Los guantes de nitrilo son la opción perfecta para sustituir el látex como material. Están elaborados a base de caucho sintético y, lo mejor de todo, es que no provocan ningún tipo de reacción alérgica.
Se usan mayormente como protección ante virus, hongos o bacterias. Por eso se utilizan en el sector de la sanidad, la industria química o el sector de la alimentación.
Pueden presentar polvo en su interior o no. Este polvo, normalmente almidón de maíz, lubrica.
#2. Guantes anticorte
Los guantes anti-corte son los que se usan en trabajos donde existe riesgo de cortarse o incluso pincharse. Protegen ante elementos como cuchillos, sierras, puntas o filos.
Existen varios tipos de materiales a la hora de encontrarlos: desde PVC hasta nitrito. Su diseño ergonómico permite que se adapte a cualquier tipo de mano.
Normalmente, están elaborados con una malla metálica de acero inoxidable que se suelda de manera entrelazada, pero que, a su vez, permite la flexibilidad de las manos.
Este tipo de guantes son reversibles, se pueden usar en ambas manos y son aptas para profesiones como la carpintería, la metalurgia o la industria textil.
#3. Guantes de protección mecánica
Los guantes de protección mecánica forman parte de los equipos de protección individual o EPIS y ofrecen una alta resistencia ante la abrasión y ante los cortes.
Son los guantes que suelen utilizarse en obras, fontanería o jardinería. Todos aquellos trabajos que puedan suponer un peligro para la integridad física del profesional, y en especial, sus manos.
A la hora de elegir guantes de protección es importante elegir marcas avaladas y que aporten la seguridad necesaria para llevar a cabo el trabajo de manera satisfactoria.
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